La etiqueta energética es un sistema de clasificación que ordena los electrodomésticos en función de su eficiencia energética. En esencia, se les asigna una letra que varía desde la A a la G, según sea mayor o menor su rendimiento. Los aparatos D y E se consideran, por ejemplo, de consumo medio, mientras que los A son los más eficientes. Dentro de esta última categoría existen otras dos, la A+ y la A++, creadas exclusivamente para frigoríficos y congeladores. Los fabricantes están obligados a realizar este etiquetado para lavadoras, secadoras, lavavajillas, neveras y lámparas de uso doméstico.

Etiqueta energética
¿ Qué es la etiqueta energética de un electrodoméstico y en qué tipo de electrodomésticos se deben usar ?
La etiqueta energética de los electrodomésticos tienen que exhibirse obligatoriamente en cada electrodoméstico puesto a la venta de las siguientes categorías :
frigoríficos y congeladores: la etiqueta informará del volumen de almacenamiento (se mide en litros) de sus compartimentos, diferenciando la parte del congelador de la del frigorífico y así como también de indicará el nivel de ruido en dB.
- lavadoras: la etiqueta informa de su capacidad de lavado en kilos de ropa y del ruido que emiten en centrifugado;
- lavavajillas: la etiqueta informa de su capacidad de cubiertos normalizada y de su eficacia de secado.
- secadoras;
- lavadoras-secadoras;
- fuentes de luz domésticas;
- hornos eléctricos y,
- aires acondicionados.
¿ Por qué hay que leer la etiqueta energética ?
A la hora de comprar un electrodoméstico, elegir uno de clase A o F puede tener importantes consecuencias en el medioambiente por el diferente consumo de energía y, por tanto emisiones en el ambiente, y un importante impacto sobre nuestro bolsillo. En el tiempo, un electrodoméstico de eficiencia energética A consumirá mucha menos luz y agua que uno de clase F.
¿ Cómo leer una etiqueta energética ?
Existen 7 clases de eficiencia, identificadas por un código de colores y letras que van desde el color verde y la letra A para los equipos más eficientes, hasta el color rojo y la letra G para los equipos menos eficientes.
Un electrodoméstico con una etiqueta energética de la clase A es más caro probablemente que uno con la letra G, pero a lo largo del tiempo consume y contamina mucho menos, menos agua, menos energía y mayor eficacia en su funcionamiento.
La etiqueta tiene además, dentro de cada clase tres niveles (A+, A++ y A+++), y deberá formar parte de cualquier anuncio o publicidad de electrodomésticos en los que se ofrezcan datos sobre la energía que consumen o su precio, así como en el material promocional técnico.
Los fabricantes están obligados a indicar el consumo energético anual en una escala de colores y letras de la A (verde oscuro) a la G (rojo). En el caso de algunos productos, la etiqueta también indicará el consumo de agua y el nivel de ruido(dB) y de calor.
El número máximo de clases será siempre de siete, de tal manera que si un nuevo producto que utiliza menos energía se clasifica como A+, la clase menos eficiente será la F (y no la G), y así sucesivamente (a un nuevo producto de clase A++ le corresponderá la clase E como la menos eficiente y a uno A+++ le corresponderá la clase D).
Para qué sirve la etiqueta energética en los Electrodomésticos y Equipos ?
▷ ¿ Qué es la etiqueta energética ? | Electricidad Gratuita

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